EconomíaPolítica

La cuarentena deja estas graves secuelas en el 2020 de la Provincia

La cuarentena, en sus diversas fases, paralizó buena parte de las actividades comerciales, industriales y de servicios.

Así, además de golpear en ingresos provinciales clave, como en la coparticipación de IVA y en la recaudación de Ingresos Brutos, Sellos e impuestos patrimoniales, también afectó (y mucho) en otras «cajas» menos relevantes, pero igualmente importantes en tiempos de crisis.

En este listado se encolumnan, por caso, las tasas retributivas de servicios, los dividendos que Lotería deriva a Desarrollo Social, el recupero de las obras sociales que drena hacia Salud, la coparticipación del Impuesto a los Combustibles, las multas de la Policía Caminera que van a Seguridad y los recursos que obtiene Caminos de las Sierras por los peajes.

En el primer semestre, estas «cajas chicas» resignaron ingresos por unos 1.950 millones de pesos. Puesto en contexto, esto equivale al 41 por ciento de todo lo que la Provincia pensaba recaudar este año por el Impuesto a la Propiedad Automotor, según la Ley de Presupuesto 2020 (4.738 millones).

Otra forma de verlo: esos ingresos que se resignaron suponen un 30 por ciento de todo el recorte que la Provincia espera lograr en lo que queda del año con la reforma en el sistema previsional (6.500 millones).

Una Lotería

Uno de los negocios afectados fue el juego. En Córdoba, la Lotería estuvo sin actividad por 52 días, y aunque el 11 de mayo retomó la Quiniela, los días de suspensión y prolongación de la parálisis en el resto de la empresa (como en los casinos) afectó la habitual transferencia de fondos para ayuda social.

Esto ocurre porque las utilidades de la Lotería de Córdoba, luego de cubrir los gastos operativos de la actividad, se destinan a sostener obras de acción social, entre ellas, el Programa de Asistencia Integral Córdoba (Paicor).

Si bien es un efecto que el Ejecutivo compensa con el reencauzamiento de otras partidas, en tiempos de ingresos en franco retroceso, cada peso perdido es grave.

Según los datos hasta junio de recaudación tributaria del Ministerio de Finanzas de la Provincia, el Fondo para la Asistencia e Inclusión Social recibió entre abril y junio apenas 10 millones de pesos: «cero pesos» en abril, dos millones en mayo y ocho millones en junio.

En 2019, en el mismo trimestre (abril-junio), el Fondo había recibido un total de 408 millones.

Los 10 millones en los tres meses de aislamiento contrastan con los 235 millones y 204 millones que se habían depositado en la cuenta del Ministerio de Desarrollo Social en enero y febrero de 2020, respectivamente. En ese momento, el Covid-19 era sólo una enfermedad que afectaba a un desconocido lugar llamado Wuhan.

De haberse mantenido este progreso interanual en marzo, en lugar de los magros 46 millones que ingresaron al fisco, podrían haberse recaudado unos 137 millones más.

Siguiendo con la misma proyección, entre abril y junio podrían haber ingresado otros 627 millones.

Así, en lo que va de la pandemia, se puede estimar que ese Fondo ya habría perdido al menos unos 764 millones de pesos.

El monto no es menor, ya que representa un 33 por ciento de los 2.286 millones que la Provincia estima recaudar por este concepto en todo el año 2020, según la Ley de Presupuesto vigente.

Multas

Uno de los recursos no tributarios más golpeados por la crisis sanitaria y económica fue el cobro de las multas de la Policía Caminera, dinero que drena hacia el Ministerio de Seguridad.

Esto se debió a una parálisis casi total del accionar de la fuerza en materia de actas desde fines de marzo y en prácticamente todo el mes de abril, durante la fase más cerrada del aislamiento. Esto, sumado al cierre en los puntos de pago («rapipagos), provocó el desplome de la recaudación.

En abril, mayo y junio se recaudaron 60 millones, 42 millones y 57 millones, respectivamente, volumen que contrasta con los 154 millones de promedio en enero y marzo.

Sin cuarentena, si se hubiera mantenido el mismo crecimiento interanual del comienzo de año, los ingresos entre marzo y junio podrían haber sido 269 millones de pesos más elevados.

En las estaciones

El confinamiento también impactó en la circulación de vehículos, lo que derivó en las magras ventas en las estaciones de servicio de todo el país.

La coparticipación del Impuesto a los Combustibles es otra importante vía de ingreso para la administración de Juan Schiaretti a partir del fondeo de tres cuentas: obras de infraestructura, obras de Vialidad Provincial y gastos del Fonavi.

En el primer bimestre de 2020, Córdoba recibió desde Nación 480 millones de pesos por estos conceptos, un 20 por ciento más que en el mismo lapso de 2019.

Sin pandemia, y si la recaudación en los meses siguientes hubiera seguido creciendo a igual ritmo, la Provincia podría haber recaudado otros 148 millones de pesos extra.

Por tasas retributivas de servicios, en tanto, resignó ingresos por 69 millones entre marzo y mayo (en junio comenzó a repuntar) y por el recupero de obras sociales, otros, 99 millones más entre mayo y junio.

Caminos de las Sierras

A estos recursos perdidos hay que sumarles los provenientes de los peajes de la Red de Accesos a Córdoba, que administra Caminos de las Sierras.

Según figura en un anexo del balance de 2019 publicado el mes pasado, la empresa controlada por el Estado provincial calcula que en los casi dos meses que las barreras permanecieron levantadas y la merma proyectada para lo que resta del año, la firma resignará recaudación por unos 600 millones de pesos.

Fuente: La Voz del Interior. La Voz del Interior