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Cafiero pasó por el Senado: «Sin justicia social, la democracia es impotente»

El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, brindó este jueves su primer informe de gestión ante el Senado de la Nación, en las medidas de protección social y económica adoptadas por el Gobierno nacional en el marco de la pandemia de coronavirus, en especial para cuidar el empleo y a las familias, y en la asistencia brindada a las empresas y a los gobiernos provinciales.

La presentación se realizó en una sesión bajo la modalidad mixta: el funcionario y algunos colaboradores estuvieron presentes en el recinto, al igual que la titular del cuerpo, la vicepresidenta Cristina Fernández y unos pocos legisladores, mientras que el resto lo hizo en forma remota por las medidas de restricción dispuestas por el aislamiento obligatorio.

El jefe de Gabinete, como es de estilo ante cada informe, respondió previamente 624 preguntas, la mayoría vinculadas con la pandemia y otras de actualidad, como la intervención de la cerearela Vicentin y las potestades para redistribuir fondos destinados a la pandemia.

En el comienzo de su discurso dio detalles sobre cómo fue el inicio de la gestión de gobierno que comenzó el 10 de diciembre. En ese sentido, afirmó que si bien Alberto Fernández se comprometió a no hablar sobre la herencia recibida tras los cuatro años de la presidencia de Mauricio Macri, es necesario dejar en claro cuál fue el punto de partida.

«Para nosotros es importante reconocer cuál era el punto de partida. Cuando iniciamos la gestión, la inflación había trepado más del 50% y la deuda pública a abarcar el 90% del PBI. También, 230.000 puestos de trabajo privado se perdieron y 25.000 pymes cerraron entre 2015 y 2019. La pobreza aumentó al 35% y alcanzó al 52% de los niños y jóvenes», remarcó Cafiero en la primera parte de su discurso.

Y agregó: «El 10 de diciembre teníamos la hoja de ruta, el presupuesto. Pero era un presupuesto con números ficticios que no contaban con un análisis real de las finanzas del país. Tenía metas fiscales y de actividad económica que no reflejaban la realidad ni las prioridades. Estaba deshilachado por este proceso de hiperendeudamiento en el que estaba sumido la Argentina».

Asimismo, aseveró que cuando asumió el Gobierno de Fernández «el país ya estaba en pandemia», y señaló que por ello el Ejecutivo tomó como primera medida la «Ley de Solidaridad Social y Reactivación productiva» con la que «empezó a diseñar un nuevo mapa del Estado, con prioridades que habían cambiado por mandato popular».

El Gobierno y su perspectiva de la pandemia

Cafiero reconoció que pese a la pandemia de COVID-19 «en este tiempo hubo más sesiones que el año pasado». «Para nosotros, es fundamental el diálogo democrático en las distintas áreas del Gobierno. Ha habido, en este tiempo, más sesiones que durante el año pasado, ha habido 65 presentaciones de funcionarios nacionales en ambas Cámaras», destacó Cafiero ante los legisladores, que lo escucharon de manera remota.

Por otra parte, indicó que «la pandemia de coronavirus y no la cuarentena es la que provocó una crisis de ingresos en las familias argentinas y la que generó los sinsabores económicos que tenemos» y consideró que la gestión nacional «debe escuchar y generar una política pública».

El funcionario consideró que el Estado «debe actuar» y tener políticas para evitar especulaciones en los precios y en las tarifas, al brindar su primer informe de gestión ante el Senado, donde enumeró las medidas adoptadas por el Gobierno desde el inicio del aislamiento preventivo, social y obligatorio. “El estado debe servir a los más humilde para luego llegar a todos (…) A la Argentina siempre le fue mejor cuando amplió derechos”, remarcó.

En este sentido, destacó la creación del IFE que, según dijo, actualmente lo cobran «9 millones de argentinos» y la creación de los ATP para que «el Estado se hiciera cargo del 50% de los salarios del sector privado, donde el 96% son pymes de menos de 25 trabajadores», entre otras medidas.

Reestructuración de la deuda

El jefe de Gabinete sostuvo que «que se aprobara por unanimidad la ley de restauración de la deuda pública» se trató de «un mensaje en voz alta que se escuchó en el mundo y es parte del reflejo para negociar una deuda contraída de manera irresponsable, que es impagable y se hace tremendamente injusta en la espada de los argentinos».

«Que se haya aprobado por unanimidad la ley para restaurar la sostenibilidad de deuda pública fue un mensaje que se escuchó en todo el mundo y que hoy es parte un reflejo para negociar una deuda contraída de forma irresponsable y que es impagable», aseveró.

Fuente: La Mañana. La Mañana