En 2016 la producción automotriz fue la más baja de los últimos 10 años
El año pasado, la caída en la producción de vehículos golpeó con fuerza a la industria automotriz y autopartista de todo el país. El impacto se siente en particular en Córdoba, donde la porción de la industria vinculada a los autos tiende a ser mayor que en el resto del país.
Entre enero y diciembre de 2016 se produjeron en total 472.776 unidades, un 10,2 por ciento menos respecto a las 526.657 que se fabricaron en el mismo período del año anterior.
De este modo, el año cerró con la menor cifra de producción de los últimos 10 años. En efecto, en 2007 se fabricaron 544.647 unidades y desde entonces ese número nunca había caído debajo de los 500 mil.
A su vez, el total producido entre enero y diciembre de 2016 equivale a no mucho más que la mitad de lo que se fabricó en 2011 (828.771 unidades), pico de producción de la década.
Los autos fabricados en Argentina tienen dos mercados básicos: el interno y el brasileño. La demanda del mercado interno no fue una catástrofe. Según Acara, en 2016 se patentaron en 709.482 vehículos, 10,2 por ciento más que en 2015 y no tan lejos del récord de 950 mil unidades de 2013.
El problema fue, sobre todo, el mercado brasileño. Mientras que en 2015 se enviaron al país vecino 184.810 unidades, en 2016 se exportaron 137.649, es decir, 25,5 por ciento menos.
También en este aspecto 2011 fue un año récord, con 410.677 unidades enviadas al exterior.
La baja de la exportación por el derrumbe del mercado brasileño trajo aparejados recortes de horas de trabajo en las empresas Fiat, Volkswagen y Renault, haciendo generalizadas las suspensiones en el sector.
“Tanto el sector automotor como de autopartes padece la caída desde 2013, agudizada con la crisis de Brasil. Los impuestos no bajaron, continuó la caída y eso llevó a las suspensiones”, aseguró Rubén Urbano, secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Córdoba.
Urbano aclaró que si bien aumentó la cantidad de vehículos patentados, “de cada 30.000, 20.000 son fabricados en Argentina, mientras que 10.000 entra del exterior”.
“La falta de fomento a la industria local, sumado a la crisis en Brasil, hicieron que terminemos mal el año, con suspensiones, baja de poder adquisitivo, y trabajadores en la calle”, afirmó.
Los autos importados pagan una carga impositiva 35 por ciento mayor a los nacionales.
Suba
En relación a diciembre, las terminales automotrices exportaron 18.802 vehículos, lo que refleja una baja de 12,7 por ciento respecto del volumen exportado en noviembre pasado, y un avance de 71,8 por ciento si se lo compara con las 10.944 unidades que se exportaron en diciembre del año anterior.
Con un promedio de 20 días hábiles de actividad, las terminales produjeron 40.087 vehículos, un 14,6 por ciento menos respecto de noviembre anterior, cuando se produjeron 46.962 unidades. Sin embargo, avanzó un 27,3 por ciento respecto de las 31.485 unidades que se produjeron en diciembre de 2015.
“Esta mejora en los últimos dos meses nos permitió recortar la caída que se dio a lo largo del año, debido a la baja sostenida de la demanda por parte de Brasil, que se tradujo en la pérdida de 1,6 millones de unidades en el mercado interno del país vecino”, dijo Luis Ureta Sáenz Peña, presidente de la Asociación de Fábrica de Automotores (Adefa).
Respecto a 2017, el directivo adelantó la necesidad de nuevos acuerdos comerciales con países como Colombia, y naciones de Centro América y África.
Luis Ureta Sáenz Peña. “Para mejorar se debe profundizar la relación estratégica comercial con nuevos mercados; trabajar sobre la carga laboral; los impuestos distorsivos que se superponen a lo largo de la cadena productiva, y la mejora en infraestructura y logística”.
Fuente: La Voz del Interior. La Voz del Interior