Policiales

Ruta del dinero K: Lázaro Báez, condenado a 12 años de prisión

El Tribunal Oral Federal (TOF) 4 condenó este miércoles al empresario Lázaro Báez a 12 años de prisión por lavado de dinero por 55 millones de dólares entre 2003 y 2015.

Además, se ordenó un decomiso multimillonario por 54.872.866,69 de dólares, en concepto del producto del delito.

Las maniobras de lavado (que tienen origen en la obra pública) se produjeron durante los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.

El tribunal a cargo del debate estuvo integrado por los jueces Néstor Costabel, Adriana Palliotti y Gabriela López Iñiguez, mientras que el fiscal del juicio fue Abel Córdoba.

El dueño de Austral Construcciones tenía un pedido de 12 años de prisión por parte de la fiscalía, mientras que su defensa reclamaba la absolución.

Báez está con prisión domiciliaria desde septiembre pasado, cuando la Cámara Federal de Casación Penal ordenó darle ese beneficio, y siguió las alternativas del juicio por videoconferencia, al igual que sus cuatro hijos.

El resto

Martín Báez, hijo mayor de Baez, también fue condenado: a 9 años de prisión.

En su caso, está detenido en la cárcel de Ezeiza desde febrero de 2019 por orden del Tribunal, ante una denuncia por un intento de trasferir 5 millones de dólares cuando estaba inhibido (el hecho ocurrió cuando ya había comenzado el juicio, que todavía era presencial, en la sede de los Tribunales Federales de Retiro).

Este miércoles, también fue condenado Leandro Báez, otro de los hijos de Lázaro. En su caso, la pena fue de 5 años.

Y Luciana Báez y Melina Báez también recibieron, cada una, una pena: 3 años de prisión en suspenso.

Además, el financista Leonardo Fariña (que se hizo famoso por su vida pública) recibió una pena de 5 años de prisión (se le redujeron 3 años por ser «arrepentido»).

Otro condenado es Federico Elaskar: 4 años y 6 meses.

Daniel Pérez Gadín, el contador de Lázaro Báez, fue condenado a 8 años de prisión.

Las condenas

Lázaro Báez: 12 años
Martín Báez: 9 años
Leandro Báez: 5 años
Luciana Báez: 3 años (en suspenso)
Melina Báez: 3 años (en suspenso)
Leonardo Fariña: 5 años (se le redujeron 3)
Federico Elaskar: 4 años y 6 meses
Daniel Pérez Gadín: 8 años
Jorge Chueco: 8 años
Fabián Rossi: 5 años

Cómo fue el juicio

El juicio a los Báez y los otros implicados había comenzado en octubre de 2018 y en los primeros tramos del debate se preveía una duración de ocho meses. Pero se sumaron inconvenientes que corrieron esos plazos hasta que, finalmente, la pandemia derivó en la suspensión de las audiencias desde el 20 de marzo último hasta junio pasado, cuando se reanudó de manera virtual.

En la causa, Báez había sido detenido en abril de 2016 por orden del juez federal Sebastián Casanello, que instruyó la causa.

En su última intervención durante el juicio, el 30 de diciembre pasado, el empresario patagónico (íntimo amigo de Néstor Kirchner) había asegurado ser víctima de una «persecución sistemática del poder político, la prensa y gran parte del Poder Judicial».

En ese momento, la fiscalía reclamó 12 años de prisión para Báez por el delito de lavado de activos y una multa de 2.121 millones de pesos.

En cuanto a los hijos del empresario, el Ministerio Público había pedido nueve años de prisión para Martín, cinco para Leandro, y cuatro años y seis meses de cárcel para Melina y Luciana.

El fiscal también pidió penas para el contador Daniel Pérez Gadín (ocho años), para el abogado Jorge Chueco (ocho años), para e Fariña (cinco años) y para el financista Federico Elaskar (cuatro años y seis meses).

El exmarido de la actriz Iliana Calabró, Fabián Rossi, tenía pedido de cinco años de prisión, entre otros acusados.

Todos los juzgados, junto con Báez y su hijo mayor, considerados autores del delito, fueron acusados por el fiscal como presuntos coautores de lavado de activos agravado por haber sido cometido con habitualidad y por haber sido perpetrados por miembros de una banda conformada «para la comisión continuada de los hechos».

Además, los jueces deberán analizar un planteo fiscal para decomisar todos los bienes que, según la acusación, hayan sido adquiridos a través de los ilícitos, entre ellos estancias, inmuebles, vehículos y dinero en efectivo.

Ocho de los imputados tenían pedido de absolución fiscal.

Por su parte, las defensas de los Báez habían reclamado la absolución y nulidad de la causa, mientras que las querellas de la Oficina Anticorrupción, la AFIP y la Unidad de Información Financiera también habían pedido condenas de prisión efectiva.

Fuente: La Voz del Interior. La Voz del Interior