Policiales

Piqueteros locales van por su obra social

En Buenos Aires, motorizaron esta iniciativa dirigentes como Emilio Pérsico (Movimiento Evita), Daniel Menéndez (Barrios de Pie) y Juan Carlos Alderete (Corriente Clasista y Combativa). Son organizaciones aceitadas, que vienen negociando con el Gobierno y que ya avizoran que la obra social estará en marcha en marzo próximo. Como tienen una estructura previa, corren con ventaja.

Hablan de unos 500 mil afiliados en todo el país, pero también de un universo potencial de dos millones de personas, para expandirse y entreverarse entre las obras sociales más grandes de

Argentina.
En Córdoba, el proceso también está en marcha, aunque más rezagado. Por empezar, la pelea de años del kirchnerismo con los gobiernos de Unión por Córdoba determinó que casi no “bajaran” a la provincia planes nacionales como el Argentina Trabaja, y eso se traduce en menor organización y en que nadie tenga hoy números certeros sobre la cantidad de piqueteros locales. Hay dispersión.

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La estructura aglutinante, tanto en Buenos Aires como en Córdoba, es la Ctep (Confederación de Trabajadores de la Economía Popular), que los propios piqueteros definen como “la CGT de los excluidos” y la herramienta sindical desde la cual demandan respuestas al Estado.

A nivel nacional, sus caras más visibles son Esteban Castro y el mencionado Pérsico, ambos del Movimiento Evita, y Juan Grabois, referente social que tiene línea directa con el papa Francisco. En Córdoba, la Ctep es coordinada por Pablo Montes (Movimiento Evita), en una estructura en la que abrevan grupos como Patria Grande, Encuentro de Organizaciones y La Dignidad.

Barrios de Pie espera la obra social, pero por ahora no participa de manera muy activa.

La Ley de Emergencia Social contempla la creación de un Consejo de Economía Popular, que en Córdoba deberán armar las organizaciones y delegaciones locales de los ministerios de Desarrollo Social y de Trabajo. También habrá un Registro de Trabajadores.

Se descuenta que esas dos herramientas serán un imán para aglutinar a los piqueteros. “Se nos abre un universo enorme. No sabemos hasta dónde llegará. En la Ctep tenemos, bien organizados, unos cinco mil trabajadores. Y ya nos consultaron para acercarse feriantes y vendedores ambulantes”, cuenta Montes.

De ser certero ese número, proyectado con grupos familiares, daría de movida unas 20 mil personas, potenciales “clientes” de la futura obra social. Otros datos: en Córdoba hay unos tres mil anotados en el monotributo social agropecuario, que hoy tienen cobertura en la obra social de Ladrilleros pero que pasarían a la de piqueteros. Y monotributistas sociales no se sabe a ciencia cierta cuántos hay ni, mucho menos, cuántos están al día con el pago de los 419 pesos mensuales.

La mitad de ese dinero la pone el trabajador; la otra mitad, el Estado. Ese dinero es el que fondearía el funcionamiento de la obra social.

Sí se sabe que son trabajadores informales con bajos aportes, que para nada tientan a las obras sociales tradicionales.

“Tenemos que generar escala, con aportes modestos pero mucha cantidad, dice por su lado Ricardo Vissani, actual legislador provincial y dirigente del Movimiento Evita.

Según Vissani, en la provincia podría haber “hasta 400 mil trabajadores” en condiciones de sumarse a la obra social de piqueteros.

“Los trabajadores de la economía popular son una realidad hace rato. Casi un tercio de los trabajadores está fuera del mercado laboral y hasta hoy eran invisibles para muchos. Darles cobertura social sería reconocer a un sector que existe desde la década de 1990”, señaló.

Quienes coinciden con los números de Vissani sueñan con una estructura gigantesca, para jugar en la liga de primera de las

obras sociales, que en Córdoba encabezan Pami y Apross, con 500 mil y 550 mil afiliados, respectivamente.

Luego se escalonan Osecac (comercio), con unos 200 mil, seguida de Osprera (peones rurales), con 120 mil adherentes.

La dimensión real de este proceso se empezaría a ver en marzo, cuando el Registro de Trabajadores cante los números reales de la cantidad de piqueteros. Hasta que eso ocurra, ellos se animan a soñar en grande.

Los últimos problemas en las calles cordobesas. Los últimos problemas generados en las calles de Córdoba, especialmente en el encendido del arbolito navideño, tuvieron como protagonistas a miembros de Barrios de Pie. Desde otros sectores sociales se les atribuye estar disconformes con el protagonismo que tienen en las discusiones con la Provincia.

Fuente: La Voz del Interior.

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