Política

La CGT quiere un acuerdo político y económico, y pidió reducir la jornada laboral

Día Internacional de los Trabajadores. En el acto, la central obrera también se manifestó por “una rediscusión” del acuerdo con el FMI.


La CGT celebró este martes, con un retraso de 24 horas, el Día Internacional de los Trabajadores. Lo hizo con un acto en la cancha de Defensores de Belgrano, en la zona norte de CABA, que, al ser día laborable, lejos estuvo de llenarse. La central obrera convocó a toda la dirigencia política y social a un “gran acuerdo” para superar la crisis y avanzar en un modelo “de producción y trabajo”, llamó a rediscutir el acuerdo con el FMI y alertó sobre lo discursos “anti sistemas” de parte de algunos precandidatos presidenciales.

Carlos Acuña, uno de los tres cosecretarios generales de la central obrera, fue el primero en hablar y el cierre estuvo a cargo de Héctor Daer, otro integrante del triunvirato. La unidad de la CGT mostró una grieta: se ausentó el tercer triunviro, Pablo Moyano, aunque sí estuvieron su padre, Hugo, y su hermano, Facundo.

La parte mayoritaria que conduce la CGT (Daer y Acuña) había invitado al acto al ministro de Economía, Sergio Massa. Al viajar a Brasilia como parte de la comitiva presidencial, Massa envió un mensaje de disculpas por ausentarse. En la carta manifestó su “compromiso” para trabajar “en la estabilización de la economía y la recuperación de los salarios”.

En el acto se leyó el documento titulado “Estamos a Tiempo” en el que La dirigencia sindical propone alcanzar “un gran acuerdo político, económico y social”. La CGT se proclamó a favor de un acuerdo “que promueva y fortalezca una verdadera y permanente alianza entre la producción y el trabajo, única fórmula sustentable para garantizar un crecimiento inclusivo con justicia social”.

Declamada por sus dirigencia la voluntad de participar en discusiones sobre el armado electoral del oficialismo, la CGT se pronunció a favor de “la política” como “única herramienta de transformación de una sociedad injusta y desigual” y alertó sobre el “desencanto y el descreimiento” que conforman el “terreno fértil para el surgimiento de emergentes que con mensajes antisistema pretenden capitalizar el descontento social, poniendo en serio riesgo la vigencia de un sistema democrático pleno que represente y contenga a todos los sectores de la sociedad por igual”, párrafo que pareció dirigido al candidato presidencial libertario, Javier Milei.

“Es urgente una rediscusión de plazos y pautas de las condiciones sobre los servicios de la deuda comprometidos con el FMI”, sostiene el documento de la CGT, en momentos en que el gobierno nacional mantiene conversaciones con el FMI.

La CGT llamó a la dirigencia política a abandonar “posturas alejadas de la mezquindad política coyuntural y los personalismos sectarios”.

La central sindical, además de proponer la necesidad de establecer un consenso sobre 10 políticas de Estado, dejó asentado en su documento una propuesta para el mundo laboral: la reducción de la jornada de trabajo.

“El sindicalismo en general y el argentino en particular se pone al frente de discutir un modelo de relaciones laborales que nos coloquen en un mundo que debate la reducción de la jornada de trabajo como medio de generar más empleo y distribuir mejor el beneficio extraordinario del capital”, dijo la central obrera.

También se defendió la negociación paritaria: “Gracias a la dinámica de la negociación colectiva, trabajadores y empresarios tenemos un espacio de concertación”, dice la CGT, que se manifestó contraria a los proyectos de reforma laboral que propone la oposición.