Policiales

La economía tuvo en abril la peor caída en toda la historia

La actividad económica de la Argentina se desplomó 26,4% anual en abril, como consecuencia de la parálisis que generó la cuarentena contra el Covid-19, por lo que anotó la peor caída desde que hay registros oficiales.

Estos datos se desprenden del estimador mensual (Emae) publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

El indicador desestacionalizado observó una caída de 17,5% respecto de marzo, mes en el que la contracción había sido el 11,5% pero con sólo 12 días de cuarentena.

Los sectores a los que peor les fue en abril fueron la construcción, con un derrumbe del 86,4%; y hoteles y restaurantes, con un 85,6%. La industria manufacturera se contrajo 34,4%, y el comercio mostró una retracción del 27%.

La actividad agropecuaria bajó 10,3%; la pesca, 19%; la explotación de minas y canteras, 20,4%; y la producción de electricidad, gas y agua, 8,3%. Transporte y comunicaciones cayó 26,1%; la actividad inmobiliaria, 19,7%; administración pública, 12,9%; enseñanza, 10,6%; servicios sociales y de salud, 32,6%; entre otros.

La economista Victoria Giarrizzo marcó uno de los “contrastes de la crisis”: la intermediación financiera cayó sólo 3,2% anual en abril. “Vendría bien un poco de colaboración del sistema financiero que pone tasas como si no hubiera crisis”, evaluó.

El Indec relacionó estas caídas históricas directamente a la pandemia. Y precisó que la actividad acumuló una baja del 11% en los primeros cuatro meses del año con relación al mismo período de 2019.

Según las comparaciones interanuales que realiza el Indec, la economía viene cayendo de forma consecutiva desde agosto de 2019. Y en los últimos 24 meses, la actividad se contrajo en 22. Pero la de abril fue la más profunda de la historia, muy superior al 16,7% de marzo de 2002.

Nadin Argañaraz y Bruno Panighel, economistas del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), señalaron que el escenario base de la fuertísima contracción que trajo la cuarentena es una recesión que ahora alcanzó los 30 meses de duración.

“El nivel de producto observado en abril fue igual al observado en diciembre de 2004. El dato de abril, por ahora, se consolida como el piso de la recesión actual”, indicaron, y agregaron que para comenzar una recuperación al salir de la cuarentena es clave solucionar el tema del canje de la deuda.

La misma idea tiene Orlando Ferreres, para quien el Gobierno debe enfocarse en resolver la crisis de deuda del país porque la recuperación dependerá en gran medida de que no haya default.

Los economistas del Iaraf dijeron que difícilmente haya recuperación en “V” y señalaron que es esperable que recién en 2022 se logre recomponer el nivel de actividad previo a la pandemia.

Jorge Vasconcelos, economista de la Fundación Mediterránea, sostuvo que un canje exitoso de la deuda pública externa es necesario para recuperar capacidad de manejo de las variables macroeconómicas, pero no suficiente.

En ese sentido, señaló que para evaluar el presente y futuro de la economía es clave no olvidar que el país transita el noveno año de estanflación. “Hay problemas por el lado de la demanda (consumo, exportaciones, inversión), pero también por el de la oferta, por el deterioro de los incentivos a invertir y producir”, advirtió.

Según el monitor del Iaraf, el impacto de la crisis aún se está sintiendo muy fuerte en el frente fiscal y la recaudación no anticipa una recuperación considerable de la actividad para las próximas estimaciones oficiales.

A nivel nacional, la recaudación de la primera quincena de mayo (que refleja en cierta medida la actividad con un mes de retraso) mostró una caída real del 33% en comparación con el mismo lapso del 2019, precisó el monitor.

Para junio, la misma caída fue del 24%, en parte explicado por una posible y ligera mejora en mayo. “Sin embargo, el panorama no es alentador desde el punto de vista de la recaudación impositiva”, indicaron Argañaraz y Panighel.

Las 5 claves: El impacto por rubros

Abril fue un mes de parálisis completa de la actividad.

1. Construcción. Fue el sector que más se paralizó por la pandemia. Se contrajo 86,4 por ciento en abril respecto de un año.

2. Hoteles y restaurantes. Otro rubro que está padeciendo el aislamiento. Cayó 85,6 por ciento en 12 meses. La parálisis es casi total.

3. Industria. La actividad en las fábricas se achicó un 34,4 por ciento en abril frente al mismo mes del año pasado.

4. Bancos. La intermediación financiera fue el sector que mejor sorteó la crisis. Cayó, pero sólo un 3,2 por ciento anual.

5. Seguidilla. De los últimos 24 meses, en 22 la actividad económica fue para atrás. Las previsiones de caída para 2020 llegan al 15%.

Fuente: La Voz del Interior. La Voz del Interior